Lesiones en el squash

El juego de squash es un juego de alto impacto y de movimiento rápido que se presta a muchas lesiones, algunas de las cuales pueden ser graves. Aparte de las lesiones que pueden ocurrir por moverse en la cancha, los jugadores también se lesionan por el contacto con la pelota, el contacto corporal con el oponente, la raqueta de su oponente e incluso la pared. Algunas de las lesiones más comunes en el squash son esguinces de músculos y tendones, esguinces de ligamentos y lesiones en los ojos. Algunas de ellas se destacan aquí.

Tendinopatía de Aquiles

Esta es una de las lesiones más comunes de la calabaza que afecta al talón o al punto medio del tendón de Aquiles justo encima del talón. Puede ser una lesión aguda o crónica y la curación puede ser lenta debido al pobre suministro de sangre a esta porción de la pierna. Los síntomas son el inicio gradual del dolor, que es peor al comienzo del ejercicio y disminuye a medida que éste avanza. El dolor generalmente disminuye con el descanso. La tendinopatía de Aquiles puede volverse crónica si el atleta no descansa o busca ayuda al principio.

La tendinopatía de Aquiles es una lesión por sobreuso que puede ser causada por el incremento de la actividad, la menor recuperación entre actividades y el ejercicio en zapatos sin el soporte biomecánico correcto necesario para proteger el tendón del estrés. Esta condición se puede prevenir calentando bien antes de jugar y estirando la pantorrilla adecuadamente después. El uso de zapatos que proporcionen un soporte adecuado también es útil. Los atletas que se sobrecargan deberían usar ortopédicos en sus zapatos para aliviar la tensión del tendón. La rehabilitación adecuada es necesaria si se sufre este tipo de lesión de calabaza para evitar que se vuelva crónica, indica el fisioterapeuta Miguel Peña. El atleta debe aplicar la fórmula RICE (Descanso, Hielo, Compresión, Elevación) a la primera señal de la lesión.

Esguinces de tobillo

Los esguinces de tobillo son otra lesión común del squash y son causados por el estiramiento y/o el desgarro de los ligamentos. Es una condición dolorosa que requiere descanso y rehabilitación. Otros síntomas aparte del dolor son la hinchazón, los moretones y la dificultad para caminar. Un esguince de tobillo grave puede ser más doloroso y tardar más tiempo en sanar que un hueso roto. La fórmula RICE (Rest, Ice, Compression, Elevation) siempre es útil, pero el atleta debe buscar la fisioterapia para promover la flexibilidad y la fuerza y prevenir la re-lesión a través de un programa de rehabilitación adecuado.

Las lesiones por squash ocurren más entre los jugadores mayores que entre los jóvenes. La falta de acondicionamiento, la rigidez generalizada, la disminución de la flexibilidad y la reducción de los tiempos de reacción pueden ser factores que contribuyen a que esto ocurra. Tomando ciertas precauciones de sentido común, estas lesiones pueden evitarse. Los jugadores deben ser cuidadosos con su entorno, usar el calzado y los lentes de protecciýn adecuados, calentarse y enfriarse completamente y mantener la fuerza y la flexibilidad. Finalmente, si usted se lesiona mientras juega al squash, deje de jugar inmediatamente y busque ayuda. En una clínica de fisioterapia pueden ayudarle a volver a estar en forma si ha sufrido algún tipo de lesión de squash.